viernes, 1 de agosto de 2008

MORIRSE EN LA OBRERA

El señor Pedro Angulo mi abuelo, papa de mi papa falleció el lunes 28 de julio del presente año. Mi abuelo acababa de cumplir un siglo de edad el día 29 de junio del presente.

El vivió casi toda su vida en la colonia Obrera en la ciudad de León Guanajuato junto con sus hijos y sus hermanos Concepción y Longino (mi tía Concha y mi tío Chato).

Mi abuelo se caso dos veces, en su primer matrimonio tuvo 4 hijos Maria, Jesus, Alfredo y Miguel y en su segundo matrimonio solo tuvo 3 hijos Javier (mi papa), Arturo y Laura.

Todo comienza hace 9 años que fallece mi tía concha la cual no pudo tener hijos y dejo toda su herencia (que no era tanto) la cual consiste en algo de dinero y la casa de la colonia Obrera en la que vivieron las personas antes mencionadas y un servidos cuando era niño (4 años). Al momento de fallecer mi tía deja como herederos a los hijos de mi abuelo, pero solo a los del primer matrimonio (a los legítimos y no a los bastardos como decían anteriormente), pero con la condición de que iban a tomar posesión de esta casa hasta que mi abuelo falleciera, así que cada una de estas personas regresaron a las ciudades donde radicaban (Alfredo a Sonora, Miguel a Guadalajara y Maria a Estados Unidos) excepto Jesus que el si se quedo con mi abuelo y con mi tío Arturo, sus hijos y su esposa Josefina que fue la persona que cuido a mi tío Chato, mi tía concha y mi tío Jesus que al poco tiempo falleció.

Desde entonces hasta la fecha Mi tía Josefina cuido a mi abuelo y sus hijos (legítimos) lo visitaban muy poco, a diferencia de sus otros hijos que lo visitaban con un poco más de frecuencia.

El día que fallece mi abuelo a las 10:30 me habla por teléfono mi mama y me lo comenta y me dice que le avise a mi papa ya que él vive frente a mi casa (fue muy difícil para mi decirle)

Un poco más tarde vuelvo a hablar con mi mama para comentarle que mi papa iba en camino, y entonces mi mama me dice que Maria (la hija de mi abuelo) tenía tiempo aquí en León y que rápido recogió el cuerpo por ordenes de Miguel y que lo incinerarían de inmediato (claro sin consultarlo con los hijos bastardos). Cuando mi papa y mi mama llegan a la casa de mi abuelo, obviamente ya no estaba el cuerpo y no tenían idea ni ellos ni mi tía Josefina que era la que lo cuidaba a donde se lo habían llevado, porque fue muy rápido. Hasta el día siguiente le avisan a mi tía josefina que lo tenía en la funeraria la Luz en la cual nos dijeron a todo mundo que no se encontraba ahí mi abuelo, inclusive fuimos a la funeraria y volvimos a ir a la casa de mi abuelo, y no se tenían noticias claras, solo que Miguel había mandado decir que a mi abuelo ya lo habían incinerado y que hasta el día siguiente (el miércoles 30 de julio)el pasaría por las cenizas y solo harían una misa.

El día miércoles todos estuvimos al pendiente del teléfono para que nos hablaran y nos dijeran a qué hora y donde seria la misa de mi abuelo (más bien de sus cenizas).
Eran aproximadamente las dos de la tarde cuando mi mama me habla y me platica lo que paso.

Mis papas volvieron a hablar a la funeraria y recibieron la misma respuesta negativa, entonces le hablan a mi tía Josefina y ella les dice que Miguel ya esta ahí con las cenizas, pero que esta a punto de irse y mi mama le pidió que se esperara para ir. al llegar mis papas a la casa de mi abuelo Miguel ya se había ido a Guadalajara con las cenizas de mi abuelo, y solo dijo que se tuvo que ir temprano porque no veía bien y tenía que regresar temprano .


Así que no pudimos ni velar, ni hacerle una misa a mi abuelo, pero le rezamos cada quien por su cuenta y en los próximos días se le hará una misa.

Solo me queda decirle algo a los hijos legítimos de mi abuelo que no nos permitieron ver ni velar, y mucho menos hacerle una misa a mi abuelo que CHINGUEN A TODA SU REQUERECONTRARETORCIDA MADRE EN UN CRUCIFIJO.

Perdón por la vulgaridad, pero es mucho nuestro coraje con esa gente.